Un sector en crecimiento es una oportudad para inversionistas. Esto es claro por definición propia de las inversiones pues, algo que muestre mayor valor en el futuro que en el presente es garantía de retorno de lo invertido.
Los expertos hablan de la salud del sector inmobiliario, de su tendencia al crecimiento desde 2006, de los efectos de las políticas del estado y de las del sector bancario, además de las mejoras paulatinas en sus procesos de digitalización.
Estas son buenas noticias para comprar casa, pero también para las inversiones del sector. Es buen momento para comprar, pero es aún mejor para invertir en vivienda.
Vamos a revisar las opiniones de Camacol, con Edwin Chiriví, y del Ministerio de Vivienda, con el viceministro Carlos Alberto Ruiz. Con ellas vamos a contextualizar las posibilidades de obtener rentabilidad de la inversión inmobiliaria.
1. Desde el punto de vista comercial
Las ventas de inmuebles muestran una tendencia al crecimiento desde 2019. Las cifras que propone para analizar el punto de vista comercial Edwin Chiriví, vicepresidente técnico comercial de Camacol, son:
“En sector inmobiliario muestra un crecimiento superior al 40% frente al primer semestre del año pasado y en términos tendenciales estamos superando las 230 mil unidades, cifras que nuestro pronóstico mostraba por debajo”.
La Haus Sessions
Expresa, además, que “eso nos describe un enorme interés de todos los actores tanto en acceder a la vivienda como en definir que esta es fuente de inversión, de reserva patrimonial, de ahorro y que constituye, quizás, una de las mejores opciones tanto en percepción de mercado como en realidad”.
La actividad comercial es un indicador importante entre varios relacionados con las dinámicas de mercado que deben considerarse para este tipo de bienes como instrumentos finacieros.
2. Sobre los cambios en los patrones de consumo de vivienda
Este es otro indicador importante para percibir el mercado y por ende, la rentabilidad de invertir.
Carlos Alberto Ruiz, actual viceministro de vivienda nos cuenta cómo ha visto un aumento en la importancia que le dan las personas a tener vivienda propia en Colombia, esto lo conocen a través estudios que evalúan los intereses de las familias y se observa que:
“El ponderador para la vivienda aumentó de manera importante, es decir, cambiaron los patrones de consumo tanto para la primera vivienda como para la segunda, en buena parte, por la pandemia.”
A estos cambios en la ponderación se suma “un salto de escala muy importante: la posibilidad de articular funcionalidades tecnológicas, canales comerciales y vehículos de promoción de los proyectos. Las búsquedas de proyectos inmobiliarios a través de plataformas pasó de 1 millón 500 mil consultas, a poco más de 4 millones y medio cada mes, entonces yo creo que el mercado se transformó, rompimos esa barrera de la presencialidad de las salas de venta y hoy en día el mercado inmobiliario es, en términos de economistas, mucho más perfecto a través de la información.”
Esto afirma Edwin Chiriví confirmando con cifras que el comportamiento de búsqueda de inmuebles ya se transformó, depende menos de la presencialidad y agiliza el acceso a la oferta de vivienda, lo cual disminuye los tiempos de selección y de alineación con las necesidades y deseos del comprador. Esto es muy importante para las expectativas de valorización de una vivienda que se adquiere para inversión.
Ya tienes datos de la perspectiva comercial, ahora hay que revisarla en conjunto con la oferta de vivienda.
3. Sobre la oferta existente para invertir en vivienda
En este aspecto del mercado también se han dado cambios importantes, si tu perspectiva es de inversión. Desde Camacol, agremiando las entidades relacionadas con la cadena de valor de la construcción, se opina que:
“El mayor salto que hemos podido tener es que la oferta ya no sea regional sino nacional, y cada vez más se acerque hacia lo global."
"Recuerden que:
Tenemos poco más de 5 millones de personas residiendo en el exterior.
Tenemos un flujo de remesas creciente nos muestra un gran volúmen de recursos disponibles.
Tenemos también una tasa de cambio que hace que mejore el poder adquisitivo de quienes envían estos recursos.
Tenemos una preferencia de inversión en vivienda en muchas regiones que nos demuestran la salud en general del mercado".
Entre distintos factores que se exploran en la conversación sobre el 2021 como momento propicio para la compra de vivienda en Colombia, vale la pena traer un indicador que se usa para revisar el estado general de la vivienda en Colombia: el comportamiento de la cartera en relación al PIB - Producto Interno Bruto.
“Desde septiembre de 2006 este indicador ha mostrado una tendencia creciente y registró un incremento anual de 0,2 puntos porcentuales (pp) en marzo de 2020, alcanzando su nivel más alto en casi veinte años”.
Fuente: informe especial del análisis de la cartera y del mercado inmobiliario en Colombia, publicado por el Banco de la República para el primer semestre del 2020.
4. De acuerdo con las tendencias en el desarrollo de vivienda
Desde el gremio de la construcción, Chiriví nos cuenta un poco sobre las variaciones en la oferta de vivienda como tendencias que muestran cómo van cambiando las formas de habitar y las posibilidades de invertir.
Hay un cambio conceptual que le parece importante tener en cuenta por lo que representa para los negocios y servicios relacionados a la vivienda:
“La percepción de la vivienda pasa de ser además de un bien, con atributos interesantes de valorización y crecimiento patrimonial, a tener un carácter como servicio. Esto hace que surjan nuevos modelos: vivienda exclusiva para renta, coliving, nichos fuertes como senior housing o vivienda estudiantil, que representan modelos distintos de administración, financiación y valorización a los que se suman otros agentes que no estaban presentes y abren posibilidades enormes”
Esto muestra una tendencia hacia la diversificación de posibilidades de rentabilizar la inversión en vivienda en los que los procesos de digitalización de los distintos sectores jugarán a favor.
En resumen:
Al conocer el comportamiento de variables asociadas con:
- El precio de los inmuebles
- Su financiación
- Los niveles de oferta
- Los niveles de ventas en el mercado
- El tiempo que tardan en venderse o arrendarse
Y sumándole las tendencias de:
- Digitalización de distintos entes del sector
- Disponiblidad y acceso al recurso desde las políticas de las instituciones bancarias y el sector público.
- Diversificación de la oferta de vivienda y de los entes y servicios relacionados.
- Ampliación de la oferta de nivel regional a uno nacional o global.
Te das cuenta que comprar casa es un buen negocio, es decir, tiene buenas perspectivas de rentabilidad.
“Es muy buen negocio en la medida en que mezclamos los elementos que anteriormente habíamos destacado: menores tasas, más oferta y un mercado cada vez más dinámico y cada vez más líquido con expectativas de valorización muy por encima de otras alternativas de inversión.”
dice, sin dudar, el Viceministro de Hacienda.
